La vereda Alto Casanare, ubicada en el corregimiento de Catambuco, fue escenario de la Segunda Jornada de Pesca Deportiva, una actividad que fortalece el tejido comunitario y dinamiza la economía local mediante el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales. El encuentro fue apoyado por la Secretaría de Agricultura y tuvo un masivo acompañamiento de la comunidad.
La convocatoria atrajo visitantes de distintos lugares como Ipiales, Chiles y San Gabriel (Ecuador), lo que refleja el creciente interés por el turismo rural y la pesca deportiva como alternativas sostenibles. La competencia incluyó distintas categorías, con reconocimientos para los tres primeros lugares en peso comercial (250-300 gramos), un kilo y la trucha más grande.
"Acompañamos este evento con el objetivo de impulsar y promocionar la actividad piscícola que se desarrolla en esta región. A través del grupo de extensionistas, la Secretaría de Agricultura se articula con la comunidad brindando talleres de capacitación, haciendo seguimiento a las actividades acuícolas y apoyando el trabajo de la Asociación La Victoria. Esta zona cuenta con un gran potencial productivo gracias a sus recursos naturales, y desde la institucionalidad trabajamos para fortalecer la acuicultura en las comunidades rurales", señaló la subsecretaria de Desarrollo Agropecuario, Eliana Miranda.
El acuicultor y miembro de la Asociación La Victoria, Rubén Alexander Chachinoy, explicó que la pesca deportiva se implementa como parte de un proyecto integral que también fortalece la piscicultura. Destacó que, gracias al agua pura proveniente de las montañas, se logra una trucha de excelente calidad, altamente valorada en el mercado. Además, expresó su agradecimiento a la Secretaría de Agricultura por el acompañamiento técnico que se brinda a los pequeños productores a través del servicio de extensión agropecuaria.
"Este es un legado que me dejó mi padre. La pesca no es solo una actividad productiva, también es arte, recreación y conexión con la naturaleza. Ojalá se repoblaran las quebradas con alevinos para que más personas puedan disfrutar de esta experiencia", concluyó el comerciante del municipio de Ipiales y participante del evento, Javier Ricaurte.
